Rafael Soler |
El pasado jueves 29 de enero tuvimos el placer de contar con él como invitado en nuestra habitual reunión del jueves, de EL LIMONERO DE HOMERO, en el Ateneo Mercantil de Valencia. Nos leyó, con su maestría, varios poemas de sus libros de poesía y dos poemas inéditos. Nos explicó su proceso de creación y, en definitiva, nos abrió su alma poética llegando por momentos a esa comunión espiritual creadora de ambientes de inspiración y amor. Toda una lección que, particularmente, agradezco; toda una jam session en la que vibraban hasta los más desafinados instrumentos en torno a la armonía de las coincidencias.
ELOGIO DE UN TAJO EN NUESTRO CUELLO
La tristeza es un don malentendido
un mariscal a cuya voz famélicos se alzan
los puños que enarbolan un sudario piadoso
para el sueño de ayer hasta mañana
la tristeza es un charco a cuya orilla llegan
en busca de consuelo los suspiros
y aquel silencio oscuro que habitó entre nosotros
la tristeza mide exactamente lo que mide
del suelo a las ausencias bien plantada
y pesa los domingos la mitad
(De LAS CARTAS QUE DEBÍA, Vitrubio, 2014)
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