viernes, 31 de agosto de 2018

VICENTE BARBERÁ: FLOR EN EL AGUA-I

MONTE FUJI, EL MÁS ALTO DE JAPÓN


I

I.- BREVE Y ELEMENTAL HISTORIA DE LA POESÍA JAPONESA

A raíz de dos viajes a Japón, en los años 2013 y 2014 respectivamente, empecé a interesarme por la poesía japonesa. Contemplar a varias geishas paseando por el barrio de Gion —en el lado oriental del río Kamogawa que transcurre lentamente por Kioto—, esas calles tan viejas y las tiendas con sus adornos japoneses y su gente, una pobre sentada en la acera con sus pertenencias pidiendo una foto, los cuervos picoteando las bolsas de basura, las luces de los faroles de papel multicolor, el respeto a la gente mayor, ese devolver la tarjeta de compras con las dos manos y la reverencia…, movieron mi sensibilidad. Aunque ya antes en diversas ocasiones me había interesado la cuestión por el conocimiento especialmente del haiku, fue en estos viajes cuando aprendí a disfrutar y sentirme atraído por la sensibilidad y características culturales e idiosincrásicas de ese país.
            He de confesar que en el mundo poético en el que me desenvolvía no era muy estimado este tipo de expresión poética. Por eso me gustaría que borráramos todos los  prejuicios sobre los haikus y que abriéramos nuestros sentidos para disfrutar, con toda la humildad del mundo, ante las manifestaciones poéticas de este tipo, especialmente porque nos va a proporcionar una concepción de la belleza en la que tiene mucho protagonismo una nueva manera de observar y apreciar el mundo que nos rodea y la situación que ocupamos en él.
Para Carlos Rubio (El pájaro y la flor.  Alianza Editorial, 2011) el portugués Luis Frois fue el primer descubridor de la cultura japonesa para occidente, en el siglo XVI, siendo en el siglo XIX cuando el fenómeno del japonismo se instaló en Europa (Japón se convirtió en la figuración más exquisita y distante del Otro que hay entre nosotros), descubriendo que «Los japoneses hacen muchas cosas de forma exactamente opuesta a lo que los europeos juzgan natural y conveniente» (Basil Chamberlain). Rubio añade: «La poesía ha asumido en Japón, país poco aficionado a la especulación y a los valores trascendentales de las culturas monoteístas, el papel que la filosofía y la teología han desempeñado en nuestra cultura». Por ello conceptos éticos o religiosos se han tratado de manera estética y poética. La mentalidad japonesa «suele concentrarse más en la parte que en el todo, en términos de espacio; y, en términos temporales, más en la vivencia del presente que en una visión racional y estructurada en donde se integran pasado y presente». De ahí que el poema japonés sea breve en la forma y fuerte en el énfasis de la percepción sensorial, frecuentemente visual. Y es tan importante, que no se concibe la prosa literaria sin poesía lo mismo que tampoco se concibe la liturgia cristiana sin música.

HAIKUS:

1
Día de lluvia.
En la linde del agua
la flor de loto.


2
Chicharra inmóvil
en el tronco de un árbol.
Las hojas tiemblan.


3
El tiempo vuela.
Cerca del aeropuerto
dos hombres corren.


4
Flor de cerezo.
Agua de primavera
llena el arroyo.


5
Atardecer.
Un gorrión en el árbol
bajo la lluvia.


martes, 28 de agosto de 2018

RICARDO BELLVESER

Nuevo artículo de Ricardo que me encuentro de regreso de una corta escapada a un balneario valenciano. Destaco el texto en fondo azul, referencias a MARÍA TERESA ESPASA, RAFAEL SOLER... y os adjunto un abrazo MUY FUERTE A TODOS.

Nueva editorial
Una excelente noticias es el nacimiento de una editorial cien por cien valenciana, mayoritariamente en castellano, y con la pretensión de presentarse ante el mundo hispánico, con el castizo nombre de Olélibros. Renace (pues ya existía, aunque ahora toma vitalidad) con tres colecciones de poesía, “Vuelta de tuerca” serie de antologías, “Nigredo” para obras inéditas e “Imaginal” para el arte y la poesía contemporánea. También edita novela y ensayo. Larga vida.

viernes, 10 de agosto de 2018

JOAN ANTONI MELÉ


Lo acabo de recibir. Me lo ha enviado Beatriz Camino.

     No conozco a Joan, pero lo que dice es muy interesante. Incluso pronuncia la palabra "poeta" más de una vez. ¿Será un salvador del universo, un benefactor, un idealista utópico? No es broma. Son 20 minutos, pero vale la pena. No perdéis nada. Lo dejo en vuestras manos.  


miércoles, 8 de agosto de 2018

CARLOS BELTRÁN

Algún día mi amigo Carlos decidirá publicar sus magníficos e intachables sonetos. Este me lo ha enviado con dos fotos que le inspiraron mientras estaba, supongo, disfrutando de un crucero por el Mediterráneo. La enhorabuena.



Desmesura

Quiere el cielo mostrar su desmesura
sobre el mar en telúrico estallido;
reclama su poder el viento herido
y las nubes sigilan su blancura.

La tarde se agiganta, en su locura
con el mundo entre sombras suspendido;
fracasa el horizonte, que ha perdido
la pureza estival de su hermosura.

Se inunda la distancia de belleza,
solemne se despliega el mar latino,
crece el cielo y el sol se despereza.

Las nubes desmenuzan caracolas
que ascienden bajo el cielo vespertino
como un ave surgiendo de las olas.

domingo, 5 de agosto de 2018

NO DESEO VIVIR SIN TU PRESENCIA

¿Qué pensaría Petrarca cuando decidió "inventar" los sonetos? ¿Y por qué dio un giro de tantos grados en en una nueva forma de expresión poética que rompía con los corsés clásicos, tan estrictos? Pero siguió con corsés. No se atrevió a componer en versos libres. ¿Qué pasaba por la mente de Petrarca? Menuda pregunta. ¿Se atreve alguien a expresar su opinión? Pero, en cualquier caso,  brindemos por quien supo crear algo tan hermoso.



NO DESEO VIVIR SIN TU PRESENCIA

No deseo vivir sin tu presencia,
sin tu eterna presencia en mi costado,
sin tu seno de rosas inflamado…
¡Sin ti nada valdría mi existencia!

Poder amarte y ser tu referencia
ya es de por sí placer inusitado;
entrégame ese mar tan agitado
con tus olas en verde efervescencia.

Fiebre feliz, albores de hermosura,
eres canto de alondra en madrugada
y luz ardiente que se eleva al cielo.

Vórtice incandescente hacia la altura,
eres llama de amor inacabada
cuando tus labios beso en breve vuelo.

(Vicente Barberá Albalat, Ensayo para un concierto y otros sonetos, Olélibros, 2016)

viernes, 3 de agosto de 2018

ADIÓS A RICARDO LLOPESA


Estimados amigos:


Ayer, al acabar de preparar mi pequeña aportación a la deuda que tenemos con Ricardo Llopesa por su amabilidad y ayuda que siempre prestó a los miembros de EL LIMONERO DE HOMERO, hablé con Blas y me quedé con las ganas de añadir alguna foto. Me fue imposible encontrar alguna después de la tarde entera dedicada a buscar por los laberintos del disco duro y de las entrañas del impío ordenador. Entre sus redes y mi memoria, advenediza cada vez más, me tejieron una malla tan tupida que me fue imposible desenredarme y encontrar una sola foto de Ricardo.
            Esta mañana, ahora son las 14 horas, más fresca mi antojadiza memoria, he  pensado en el blog en donde en su día iba anotando cosas, y así empezó a amanecer, aunque las fotos ya habían perdido densidad. De todos modos me sirvió para recordar muchas cosas y, efectivamente, fue apareciendo información de Ricardo y de las actividades del grupo EL LIMONERO DE HOMERO. Comprobé que en junio de este año se cumplió el décimo aniversario de la creación de mi blog de POESÍA. Y parece que fue ayer. Y cuántas cosas ha borrado la memoria. De muchas noticias ni me acordaba, pero sí me sirvió la reflexión para que, sobre la marcha, fueran alumbrando las farolas y asomase la luz por los resquicios de mis recuerdos.
            Poco a poco, pues, fui recomponiendo situaciones y, precisamente en el residuo de los objetos que incluyo en el blog y que algunas veces guardo en el disco duro, encontré unas valiosas fotos —para mí— que voy a intentar trasladar a Facebook, ya que en este blog sería antiestético por la cantidad de ellas que quiero pegar.

            
La calidad no es la deseada y os pido perdón por ello. La intención me salva. He conseguido seleccionar algunas relativas a la presentación de nuestros dos primeros libros, a la invitación para asistir a una de las sesiones en el Ateneo, al bar de las reuniones, a la Feria del Libro y a la invitación culinaria en mi casa cuando yo vivía en la calle Trafalgar.
            Esta mañana he hablado con Nacho, su hijo, y me ha informado del pesar que embarga a su hermana y a su madre. Desde aquí, una vez más, me uno al pésame por la pérdida de una persona irremplazable.
            Gracias a todos por estar ahí y comprender las circunstancias que rodean mi tristeza.
            Un abrazo muy fuerte.

jueves, 2 de agosto de 2018

RICARDO LLOPESA




RICARDO LLOPESA

Por Blas, me acabo de enterar de la muerte de Ricardo Llopesa, gran persona y erudito en poesía, especialmente de la obra de Rubén Darío, paisano suyo, como es sabido.
            Tuve la inmensa suerte de conocerlo cuando nos reunía a un grupo de aficionados —sigo siéndolo— que intentábamos componer poemas. En un rincón oscuro e incómodo de un bar de la Plaza del Ayuntamiento de Valencia, entre ruidos que a veces enturbiaban la comunicación, nos corregía y animaba a seguir con una paciencia y sencillez prodigiosa. Sus observaciones eran precisas y sabias en el sentido lato de la palabra.
            Los dos primeros libros de EL LIMONERO DE HOMERO fueron editados por la editorial Instituto de Estudios Modernistas, desde la que ilusionó a muchos vates, sobre todo a los que se iniciaban en el arte de las musas. En el primero de esos dos libros nos obsequió con un prólogo generoso del que copiamos este párrafo: «Son distintos a ellos mismos y los demás. Son cultos y exquisitos. Se exigen mucho. Eso los hace ser un grupo que sin agitar bandera sabe adónde se dirige». Más adelante se refiere a una «unidad heterogénea» como cualidad relevante del grupo. Por él me enteré de que mi estilo era «fluido y despejado de retórica». Con motivo de una visita al grupo —y lamento haber perdido entre los laberintos del ordenador las fotografías que tenía de las veces que estuvimos juntos— escribe una carta —que sí poseo— en la que describe algunos aspectos de nuestra personalidad. De mí escribe: «Es el poeta de la alegría. Sus poemas parecieran escritos bajo la consigna de Lope, para quien los poemas de amor debían escribirse en redondillas y en romance los festivos». Gracias querido Ricardo, por tanta generosidad.
            En 2011, con motivo del éxito obtenido con nuestro primer libro de EL LIMONERO DE HOMERO, Ricardo se ofreció a cocinar para nosotros una comida típica nicaragüense. Nos reunimos en mi casa los seis (Ricardo, Antonio, Blas, Joaquín, José Luis y yo), y disfrutamos de su buen hacer culinario y, una vez más, de sus historias y experiencias.
            Por eso ahora entiendo que no me contestara cuando, hace poco más de un mes, le envié dos correos pidiendo su participación en el proyecto sobre el 50 aniversario de la muerte de León Felipe organizado por la editorial Olélibros con el Ateneo de Madrid.
            Su muerte es una pérdida para la poesía valenciana, especialmente en el sentido de promoción y ayuda a los nuevos valores. Era un maestro que disfrutaba compartiendo con los demás sus conocimientos, que exponía con gran profusión de detalles, como si dibujara en el aire, al mismo tiempo que describía escenas y acontecimientos con una memoria prodigiosa.
            Descansa en paz, querido amigo.

Dedicatoria con motivo de la reunión en la fecha indicada (jueves en el Ateneo Mercantil) con Ricardo Llopesa.
(El grupo EL LIMONERO DE HOMERO presenta a poetas a participar en algunas de  su sesiones de trabajo).

miércoles, 1 de agosto de 2018

JOAQUÍN RIÑÓN: MEMORIA CREPUSCULAR

Joaquín Riñón, en el centro
Estimados amigos:

Joaquín Riñón Rey es un gran amigo. Con la edad los amigos van desapareciendo; se pierden al final de una línea borrosa e indefinida dejando un hueco difícilmente reparable. Y la suma de esos vacíos van llenando el hueco de la vida. No recuerdo exactamente cómo ni cuándo lo conocí. Probablemente un amigo común, Juan, nos presentaría en alguna ocasión, pero sí recuerdo cómo venía a Barcelona acompañado de su querida esposa Sefa su “querida esposa alada”, ya fallecida.            
            Cuando vine a Valencia destinado, frecuentábamos los encuentros a lo que ayudó la circunstancia de vivir cerca (Calles Aragón y Bélgica). Su hija mayor es una excelente cantante de ópera, una soprano cuyos recitales e intervenciones en óperas fuimos juntos a ver tantas veces… en el teatro de Castellón y en numerosas pueblos e Iglesias gozando de la amistad y la circunstancia del amor a la música. Además, el hecho de dedicarnos ambos a la docencia hacía más fácil nuestra amistad.
            Ya jubilado yo, tramamos la formación de un grupo poético. Con motivo de la boda de su hija mayor y la presencia de un amigo suyo, dimos por buena la idea de la que salió EL LIMONERO DE HOMERO cuya existencia recientemente ha cumplido 10 años.
            Joaquín es una persona muy meticulosa en sus producción poética y muy exigente. En cada una de las reuniones lo demuestra aportando observaciones sobre los lugares comunes, buscando versos y formas poéticas originales. Sus apreciaciones de sintaxis son precisas propias de un profesor de Lengua y Literatura. Pero tal vez por esa meticulosidad y lo riguroso de sus planteamientos no es prolífico. Ha ganado algunos premios y ha publicado poemas en los cuatro libros de EL LIMONERO DE HOMERO y algunas revistas y antologías.
            Nosotros, los restantes miembros de EL LIMONERO DE HOMERO, queríamos que publicase un libro y finalmente lo hemos conseguido. Yo estaba seguro de que sería un libro de nivel, de una calidad relevante y así ha sido. Se presentó en el salón de la SGAE, de Valencia, en un acto muy emotivo en el que participó su familia, pero no es suficiente porque el libro merece ser conocido, porque es un puro deleite para los amantes de la poesía de calidad.
            Y eso viene a decir Elena Escribano, conocedora a fondo de la Literatura Española y autora de numerosos libros de texto, en un comentario que me ha facilitado después de la lectura de su libro Memoria Crepuscular, editado por Olélibros, escrito para Blas Muñoz a propósito de que éste le facilitara el  libro:

He leído con mucho placer el libro de poemas Memoria Crepuscular, de tu amigo Joaquim Riñón Rey.
  Me ha gustado mucho.
  Muestra una enorme sensibilidad y un uso del lenguaje poético excepcional.
  Desde el primer poema hasta el último podemos percibir un dominio del ritmo realmente sorprendente.
  Son poemas que emocionan por su sencillez clásica y honda; poemas que atravesarán los años y mantendrán transparente su frescura porque no caen en modas pasajeras, sino que se adentran en el alma y sus recovecos para conocerla, comprenderla y mostrarla a los demás desnuda y honesta, como hace la buena poesía .
  Hay serenidad en sus versos. Hasta en las preguntas sin respuesta. La respuesta la encontramos en la emoción de la poesía y eso que nunca sabremos qué es, y a pesar de todo abre puertas en el alma del que la lee. Gracias por habérmelo regalado.
  Un abrazo muy grande.

            “Muerte en La Malvarrosa”, por solo citar un poema, estoy seguro de que no dejará a ningún lector indiferente.

Portada del libro