A veces cae en tus manos un libro arrinconado en la librería, amarillo por el tiempo acumulado, lo lees y tu imaginación empieza a volar, tu mente a dudar y acudes al diccionario para actualizar tu léxico removido en la nostalgia. Y ya al final, aparecen unos sonetos casi perfectos. Es el caso de, PERLAS NEGRAS y MÍSTICAS, del poeta mexicano Amado Nervo (Juan Crisóstomo Ruiz de Nervo y Ordaz, 1870-1919)
Transcribimos el primer soneto de EN EL CAMINO, de Místicas, dedicado a Leopoldo Lugones:
I
RESUELVE TORNAR AL PADRE
No temas, Cristo rey, si descarriado
tras locos ideales he partido;
tras locos ideales he partido;
en mis días de lágrimas y
olvido,
ni en mis horas de dicha te he olvidado.
ni en mis horas de dicha te he olvidado.
En la llaga cruel de tu costado
quiere formar el ánima su nido,
olvidando los sueños que ha vivido
y las tristes mentiras que ha soñado.
quiere formar el ánima su nido,
olvidando los sueños que ha vivido
y las tristes mentiras que ha soñado.
A la luz del dolor que ya me
muestra
mi mundo de fantasmas vuelto escombros,
de tu místico monte iré a la falda,
con un báculo: el tedio, en la siniestra,
con andrajos de pintura en los hombros,
con el haz de quimeras en la espalda.
mi mundo de fantasmas vuelto escombros,
de tu místico monte iré a la falda,
con un báculo: el tedio, en la siniestra,
con andrajos de pintura en los hombros,
con el haz de quimeras en la espalda.
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