Moon River
-Henry Mancini-
“Algunas cartas deben leerse
con los labios pintados”,
me dijo Holly Golightly
cuando fui a visitarla
al hospital.
Hace tiempo que ella
ha abandonado definitivamente
el East Side.
Desde entonces, Nueva York
es una ciudad más triste
y ya no suelo
almorzar en Tiffany’s.
Cuando acabó la guerra,
traté de buscarla por Europa
y viví durante unos años en París.
La última vez que la vi
ella tenía veinte
y yo era pobre;
ayer compré un diamante
para celebrar su cuarenta cumpleaños:
“llevarlos antes de esa edad
es una horterada”, me dijo un día.
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