Susana Benet y Vicente Barberá en la presentación de POETAS EN EL ATENEO XX (30-11-18) |
VICENTE
BARBERÁ, EL POETA DEL SONETO
La vigésima
edición de “Poetas en el Ateneo”, celebrada el pasado 30 de octubre, tuvo como
protagonista al creador y motor de esta brillante idea, el poeta Vicente
Barberá. El acto se inició con las palabras de presentación de Vicente Bosch, quien
a su vez presentó al también poeta Ricardo Bellveser, recién Premio Nacional de
Poesía “Cultura viva”. Con esa amenidad
que le caracteriza, Bellveser recordó la primera edición, en la que
precisamente él fue el protagonista, e hizo una comparación entre el Ateneo de
Madrid, un tanto apagado hoy en día, y el Ateneo Mercantil de Valencia, vivo y pujante,
debido en buena parte a realidades como “Poetas en el Ateneo”.
A Barberá le gusta decir que nació en las
tierras de los Ibarsos, en Castellón. Su obra poética comprende:
cuatro poemarios De amor y sombras
(2014), Ensayo para un concierto y otros sonetos (2016), Flor en el agua (2018) y Después
del amor (2018), participación en las antologías “Arquitectura de la Palabra”
(2012), “Miradas para compartir la luz, antología poética de autores
valencianos” (2016), “Poetas y Realidad” (2018), así como en los diversos
volúmenes que recogen parte de la obra poética del grupo “El Limonero de Homero” (2010, 2011, 2012, 2017).
En esta vigésima edición de “Poetas en el
Ateneo” se invirtieron los términos: Vicente Barberá, entrevistador habitual,
era el entrevistado y Susana Benet, protagonista y entrevistada en la XVI
edición, era la entrevistadora. En primer lugar, se procedió al recordatorio
fotográfico: de pequeño, en la plaza dels Ibarsos, con su madre y abuela;
coloquio de Inspectores, con Concha Gómez, Juan Escámez y Josep Lluis Felip;
con el poeta Rafael Soler; en la presentación de las colecciones poéticas de la
editorial Olé libros…
Tras
ello, Susana efectuó un breve recorrido por la trayectoria profesional de
Vicente. Su dilatada vida profesional transcurrió como maestro, Director
Escolar, Profesor de Educación Secundaria, Doctor en Ciencias de la Educación
por la Universidad Autónoma de Barcelona, Profesor de Pedagogía de la
Universidad de Valencia, Profesor invitado en diversas Universidades europeas y
sudamericanas, autor de más de 25 libros y más de un centenar de artículos en
la prensa especializada, Subdirector de Educación, Agregado de Educación en Suiza y Austria,
Alto Inspector de Educación del Estado e Inspector Jefe de Educación de
Valencia. Una trayectoria profesional, impecable.
Y,
tras ello, vino la preceptiva serie de preguntas:
– ¿Cuándo
empezaste a interesarte por la poesía? – inquirió Susana.
– Como
casi todos los estudiantes, yo también escribía poemas a los 18 años, poemas
muy ingenuos. Después mi vida transcurrió por otros derroteros muy distantes de
la poesía; pero, al jubilarme, me acerqué al grupo “La Buhardilla”, dirigido
por Teresa Espasa y ya no pude abandonarla – responde el poeta.
– ¿Te
consideras una persona feliz?
– Sí, con
el tiempo he cambiado y hoy me siento feliz.
– O sea
¿eres feliz a pesar de los inconvenientes?
– Sí,
no hay una fórmula para ser feliz, pero el primer paso es controlar la mente y
amar: amarse a sí mismo y a los demás. Hace once años creé un taller sobre la
felicidad que actualmente estoy dirigiendo, y eso me llena y creo que llena a
otras personas que regularmente asisten al taller.
–
Formas parte de “El limonero de Homero” ¿cómo nació este grupo?
– Yo
conocía a Joaquín Riñón y, a su vez, él conocía a Blas Muñoz, Antonio Mayor y
José Luís Prieto. Hicimos una reunión y acordamos constituir el grupo y que
este tuviera solo cinco poetas. Después, José Luís no pudo continuar y María
Teresa Espasa aceptó la invitación de integrarse en el grupo. Hoy en día quizá
fuera conveniente que entrara algún poeta algo más joven y aumentáramos el
número acordado en aquellos principios.
– ¿Qué poetas te gustan más o cuáles te han
influido?
– Mi convivencia con la poesía es
reciente y no tan intensa como sería necesario. Estoy todavía en la fase de
aprendizaje inicial. Leo mucho de todo lo que llega a mis manos y no hay poeta
en el que no encuentre algo que me motive o interese. A bote pronto, los
primeros que acuden a mí mente son: Quevedo, Lope, Villamediana, Pessoa,
Borges, pero la lista podría ser interminable, y siempre faltaría alguno.
Especialmente me gustan los poetas que cultivan el soneto, que es la forma
poética que prefiero.
–
¿Estás trabajando en algún proyecto nuevo?
– Estoy
escribiendo una novela y estoy meditando sobre un aspecto de un capítulo.
Espero que llegue a buen fin y os la pueda anunciar en un futuro próximo.
La
proyección de la lectura de su poema “A una madre herida” por parte de Virgilio
Fuero, dio paso a la lectura de haikus por parte de la misma Susana Benet y de
poemas por parte de algunos de los y las poetas que llenaban la sala: Amparo
Martínez recitó el bello poema “No deseo vivir sin tu “presencia”; José Emilio
Castillo, “Amanece y estoy enamorado”; Mª José Fernández, “Lejos están los
nidos de mi infancia”; Miguel Bosch, “La mirada del cielo en tu mirada”; y Mila
Villanueva, “Esa mujer que ves”.
En resumidas cuentas, una tarde poética espléndida. Con una Susana Benet
acertada y un Vicente Barberá sencillo, emotivo y brillante. Y, para noviembre,
otro gran poeta valenciano: Antonio Praena. Felicitaciones a Barberá por esta
tarde poética tan cálida y por esa brillante idea de “Poetas en el Ateneo” que
ya va por su tercer aniversario.
Pascual Casañ
2 comentarios:
Un ambiente acogedor y una lectura espléndida, a pesar de la lluvia. Besos
Muchas gracias por tu presencia y participación.
Ha sido la primera y única posible de ese tipo.
Estará siempre vinculada al PROYECTO POETAS EN EL ATENEO, y yo, agradecido.
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